Imagen de Billy Cedeño en Pixabay

La educación infantil es una fuente tanto de alegría como de estrés para millones de personas en todo el mundo. A nivel nacional, es un tema grave.

Los años de vida escolar son una época de exploración, de aprendizajes y de conocer sobre nuevas culturas e ideas, pero también puede ser una época de lucha donde los problemas económicos e intrafamiliares impiden que algunos niños tengan las mismas oportunidades que sus compañeros.

La educación, en todas sus formas, es esencial para luchar y reducir la pobreza al garantizar que todos los niños tengan oportunidades en sus vidas.  

Este artículo examina la conexión entre la educación infantil y la pobreza estructural, centrándose en los aspectos básicos del tema hasta la pregunta más importante: ¿Cómo ayudar a erradicar la pobreza infantil? 

¿Cómo surge la pobreza infantil?

La indigencia infantil se produce cuando las familias de estos niños carecen de dinero, recursos y oportunidades educacionales y laborales para satisfacer sus necesidades. Las necesidades básicas de los niños varían según las culturas y los países, pero todos necesitan alimentos sanos, agua potable, una vivienda urbanizada, atención sanitaria y acceso al sistema educativo para poder vivir adecuadamente.

Las personas bajo el umbral de pobreza tienen dificultades para poner comida en la mesa para sus familias, pagar el alquiler o hipoteca y para acceder a los servicios médicos en caso de enfermedad.

Existen muchas formas de medir la pobreza, dependiendo del aspecto de la pobreza en el que queramos centrarnos. Por ejemplo, se puede medir la pobreza a través de los ingresos diarios, el acceso a servicios básicos, a los alimentos y a centros sanitarios. 

En México, la pobreza se mide con otros factores más allá de los ingresos, como el acceso a centros de educación dignos, a través de la seguridad alimentaria y social y el nivel de la atención sanitaria.

¿Cuántos niños viven en pobreza en México? 

Según datos de Statista para el año 2020, más del 52% de los mexicanos menores de 18 viven en pobreza, que son apróximadamente unos 20 millones de niños y adolescentes en esta trágica situación en la actualidad.

La pobreza infantil es un problema complejo y su abordaje requiere un enfoque multifacético. Los efectos de la pobreza en el desarrollo de un niño pueden permanecer por toda la vida, por eso es tan importante ocuparse de la reducción de la pobreza lo antes posible.

Muchas ONG han implementado estrategias de desarrollo integral para abordar la pobreza infantil desde la raíz. Se han centrado en mejorar las oportunidades de los niños desfavorecidos otorgándoles educación gratuita y de calidad para que superen su futuro con las herramientas necesarias para labrarse un porvenir.

¿Cuáles son los efectos de crecer pobre?

Las consecuencias exactas de crecer en la pobreza difieren según el niño. Pero, en general, ser pobre durante la infancia puede dificultar la salud mental y el bienestar general. La mala nutrición, el acceso limitado a la asistencia sanitaria y los bajos niveles de apoyo social afectan directamente a sus derechos humanos y al crecimiento económico del país.

También hay efectos indirectos de la pobreza infantil que pueden causar problemas de por vida. Crecer en la pobreza puede afectar la autoestima de una persona y su capacidad para triunfar en la vida.

Los niños y niñas que viven en la pobreza son más propensos a tener malos resultados en la escuela, porque a menudo se enfrentan a episodios de enfermedad y problemas de estrés en el hogar que pueden interferir significativamente en su capacidad de aprendizaje. 

Además, los niños en esta situación suelen sentirse avergonzados por ella y sus compañeros de escuela tienden a ser insensibles y hasta burlarse de ellos. Este problema en específico solamente podrá ser afrontado con educación de por medio.

¿Cómo erradicar la pobreza infantil con educación?

Existen muchas formas de combatir la pobreza infantil. Una de las más importantes es proporcionar ayuda económica a los padres de familias con bajos ingresos para ayudarlos a cubrir las necesidades básicas de sus hijos.

Esta ayuda puede transformarse en asistencia alimentaria, ayuda para el alquiler o la hipoteca y apoyo en gastos sanitarios.  

Otra forma importante de combatir la pobreza infantil es promover la movilidad social.

Promover la movilidad social implica crear oportunidades para que los niños pobres salgan adelante en la vida y rompan con el ciclo de pobreza, incluyendo el acceso a una educación infantil de alta calidad o la mejora de las escuelas públicas en las zonas de bajos ingresos.  

La lucha contra la pobreza infantil requiere una acción en todos los niveles de la sociedad.

En Fundación Esperanza Contigo A.C, trabajamos duro para hacer nuestra parte, pero necesitamos de tu ayuda ahora.

Comprometidos con varias casas hogar y orfanatorios en Tijuana, México, luchamos contra la pobreza infantil dando a los huérfanos de la ciudad el poder de planear su futuro con una educación completa, recursos indispensables y una atención sanitaria optimizada.

¡Ayúdanos a seguir trabajando por los más vulnerables! 

¡Dona o hazte voluntario con nosotros hoy mismo!